top of page

WELCOME

Fátima nunca supo cómo llego a ese lugar; un jardín tan acogedor que desde que pisó su cesped, se sintió como en su casa. Cada día levantaba una pared nueva hasta convertirlo en un cálido hogar y cada noche soñaba que las flores cantaban con el viento de los Cerros. Poco a poco fue encontrando la forma de conectarlo con el mundo exterior y decidió mostrarlo a esos amigos calmados y llenos de paz.

BIENVENIDOS

PULSERA_HOSTAL_FATIMA
bottom of page